Reflexión #1

Ojalá volviese a tener unos 8-10 años. Ojalá volviese a mi infancia.
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Cuando somos niños todo es más fácil.
No hay problemas realmente graves, todo se arregla de manera fácil.
Cuando eres un niño parece que siempre te quedarás así, siendo un crío en su dulce infancia.
Pero luego creces, y entonces te das cuenta de todo. La vida sigue, todo continúa.
Nunca estarás en la infancia de por vida, por muy dulce que sea.
Todos lo deseamos alguna vez...Todos lo ansiamos cada día.
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Ahora, aunque no soy tampoco muy mayor, me he dado cuenta de que ya no soy una cría.
Aunque lo desee, lo ansie o muriese por ello.
Y llegan problemas y mierdas que hay que superar. ¿Por qué?
¿Por qué mi vida es una mierda?
¿Por qué tuve que ser así?
¿Por qué todo me da la espalda?
Mi única fuerza es pensar: ''Sigue, y a ver que consigues''
Total, al final todos moriremos. Al final moriré, ¿qué importará lo que haya hecho o no?
Por eso, por ello seguiré. Me importa una puta mierda lo que piensen los demás.
Que yo sea distinta, que me salga de lo normal. Que no haga lo que ellos hacen.
Que les den.
Algún día me reiré de todos...algún día sentiré que estoy en la infancia de nuevo, de una manera u otra. Me sentiré en un símil de mi infancia y mi actualidad. 
Un símil en el que coinciden sensaciones y sentimientos.
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